Una gran parte de los fondos de la Biblioteca Central Militar tratan de la fortificación, ciencia específicamente militar que, desde el siglo XVI, está ampliamente representada en esta Biblioteca con publicaciones originales de los grandes ingenieros militares europeos de los últimos cinco siglos. Uno de ellos, el mariscal de campo español don José Herrera García, nacido en El Puerto de Santa María (Cádiz) en 1798, es una figura relevante de la fortificación española del siglo XIX. Partícipe de numerosas acciones militares que tuvieron lugar en el agitado devenir del siglo XIX, su labor como ingeniero la desarrolló en numerosas plazas españolas como Sevilla, Tarifa, Algeciras, Granada o Melilla, entre otras. Consciente de la necesidad de desarrollar nuevas técnicas de fortificación para adaptarlas a la evolución constante de la artillería, fue el precursor de la artillería acasamatada y autor de tres sistemas de fortificación totalmente innovadores. Sus tres principales obras Restablecimiento del equilibrio de fuerzas entre el ataque y la defensa de las plazas fuertes (1842), Teoría analitica de la fortificación permanente (1849) y Examen comparado del estado actual del arte de fortificar (1853) explican cada uno de los tres sistemas citados.

En 1855, fue nombrado Jefe de la Comisión del Proyecto de Vigilancia y Defensa de las Costas del Reyno, proyecto al que se dedicaría hasta su fallecimiento el 15 de abril de 1865. Este último trabajo, inconcluso, sería continuado por su sucesor en la jefatura de la Comisión, el Coronel don Nicolás Valdés y Fernández. Lo integran las memorias y los atlas en los que se analiza la situación defensiva de las costas de gran parte del litoral peninsular y se proponen los planes para su fortificación, con gran profusión de planos de diseño y mapas coloreados, constituyendo una exclusiva e inédita colección.

La Biblioteca Central Miltar, con el apoyo del Archivo General Militar de Madrid y el Centro Geográfico del Ejército, ha llevado a cabo la recopilación de toda su obra incluyendo la parte inconclusa llevada a cabo por su sucesor y la pone a disposición de lectores e investigadores a través de la Biblioteca Virtual de Defensa.