La Fotografía Histórica del Museo del Ejército es una de las colecciones de mayor relevancia de la institución tanto por su diversidad de formatos, técnicas y temáticas como por su interés tipológico, gráfico, documental e histórico, que es preciso dar a conocer a la sociedad.
A través del excelente y heterogéneo fondo fotográfico del Museo del Ejército se aprecia la evolución técnica de la historia de la fotografía, desde finales del siglo XIX hasta la segunda mitad del siglo XX (daguerrotipos, ferrotipos, fotografías sobre papel, placas de vidrio, entre otros). Existe mucha representación del formato carte de visite, fotografía estereoscópica, álbumes, etc.
Las claves temáticas de la colección son variadas. Se recogen numerosos retratos fotográficos de miembros de las casas reales española y europeas, militares ilustres y personalidades nacionales e internacionales, que han sobresalido en cualquiera de los campos de la historia, la ciencia o el arte de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Desde el punto de vista cronológico, la pieza más antigua es el extraordinario dagerrotipo con el retrato del General Ramón María Cabrera, datado hacia 1852 y realizado en Londres. Además, se puede apreciar un variado elenco de personajes decimonónicos en el formato carte de visite, procedente de la valiosa colección Romero Ortiz. La mayoría de estos retratos fueron realizados por prestigiosos fotógrafos de la época, como Laurent o Nadar.
Predomina también otro eje temático en torno a los conflictos bélicos: Guerras Carlistas, Colonias de Cuba y Filipinas, Guerra de África, Guerra Civil, etc. Entre las colecciones temáticas, sobresale la relacionada con la Primera Guerra Mundial. Durante esta contienda se creó en Madrid la Oficina Pro Cautivos, dentro de la Oficina de Información de Guerra ubicada en el Palacio Real y respaldada desde la secretaría de Alfonso XIII. Entre el material gráfico que se recibía en esta oficina, gran parte procedía de la agencia alemana de noticias BUFA (Bild Und Film Amt), que difundió tanto imagen fija (fotografía) como en movimiento (cine). En el Museo del Ejército se conserva un extraordinario conjunto formado por imágenes procedentes de esta agencia alemana. Estas fotografías, además, conservan en muchos casos dorsos fotográficos con etiquetas que sirven de comentario a cada una de las instantáneas. Son un compendio excepcional y en ellas se reflejan distintos aspectos de la Gran Guerra. En general, son imágenes en las que se narran la rutina de la contienda, los movimientos de tropas, las ciudades, etc.
Asimismo, destaca el fondo fotográfico procedente de la Hermandad de Voluntarios de la División Azul. Por una parte, se encuentran los retratos de los voluntarios que participaron en la contienda del este de Europa; por otra, se recogen las imágenes tomadas por los propios soldados que participaron, material que se caracteriza por lo intimista de la mayoría de las imágenes, en donde se refleja la individualidad del voluntario.
Por otro lado, son interesantes las vistas de ciudades, normalmente pertenecientes a álbumes (como, por ejemplo, el álbum con Vistas de Italia de la colección Romero Ortiz, realizado hacia 1866), así como los panoramas de centros vinculados con el ejército (fábricas, academias, prácticas, promociones, maestranzas). Además, a través de imágenes de las salas del Museo y el edificio del Salón de Reinos del Palacio del Buen Retiro de Madrid, anterior sede de la institución, disponemos de una gran fuente documental para el estudio de las antiguas museografías.
La digitalización y puesta en valor a través de la Biblioteca Virtual de Defensa de la colección de Fotografía Histórica del Museo del Ejército, facilita su contemplación y difusión al servicio de los ciudadanos. Además, se posibilita una conservación adecuada del material fotográfico, objeto físico-químico complejo, inestable en la mayor parte de los casos y muy susceptible a sufrir deterioros por una manipulación inadecuada.