Sección: Publicaciones de Defensa
Título: Combates navales en el Pacífico y Atlántico Sur, Coronel y Malvinas / José Manuel Gutiérrez de la Cámara Señán
Notas: Bibliografía
Resumen: Este artículo analiza los combates navales que tuvieron lugar en el Océano Pacífico Sur y en el Océano Atlántico Sur en la Gran Guerra, entre la flota alemana y la flota inglesa. Así, vemos que la escuadra alemana del Pacífico que mandaba el almirante Von Spee se encontraba en las islas Carolinas. El 17 de julio se encontraba en Ponapé; allí, Von Spee se enteró de la entrada de Inglaterra en la guerra, de la neutralidad de China y de las preocupantes noticias que llegaban de Europa. La heterogénea flota puso rumbo a las islas Marshall, donde buscó un socaire en la isla de Majuro para hacer combustible en los carboneros. El 7 de septiembre se le asignó al crucero Nurember la misión de cortar el cable telegráfico inglés en las islas Fanning, cosa que hizo sin ninguna dificultad. A medida que la escuadra de Von Spee se dirigía hacia el Este, el pabellón británico iba ondeando en las islas que habían pertenecido a Alemania, siendo la naciente Armada australiana la que se ocupó del cambio de bandera sin ningún cañonazo, solo por efecto de la disuasión. La escuadra inglesa del vicealmirante Croadock era la encargada de impedir la entrada de la escuadra alemana en el océano Atlántico. Esta escuadra no era la más adecuada para enfrentarse a la eficiente escuadra alemana. Cradock había salido de las Malvinas el 22 de octubre y entró en el Pacífico. Desde las islas Chonos puso un mensaje al Almirantazgo, señalando su intención de dejar atrás al viejo Canopus, ya que limitaba mucho la velocidad de avance. Sin el Defence ni el Canopus, Cradock iba al desastre. Después de intenso cañoneo y con la pérdida de 1.654 hombres y de los dos cruceros señalados, lo que dió mayor importancia al combate fue el dominio de las aguas sudamericanas del océano Pacífico por la escuadra alemana; la inmediata consecuencia fue la paralización del tráfico marítimo con Sudamérica. El dominio de esta zona era decisivo para el aprovisionamiento de nitrato de Chile, tan importante en la fabricación de municiones. Después del combate, la escuadra se dirigió a Valparaíso, donde Von Spee se aprovisionó de carbón e hizo testamento. Los británicos buscaban a oda costa la destrucción de la flota alemana, pero Von Spee estaba dispuesto a tener en jaque a toda la flota. La cantidad de unidades de la Royal Navy, y también japonesas, movilizadas después de este desatre fue enorme, y no era para menos, pues fue la mayor derrota naval sufrida por Inglaterra durante la guerra. El almirante Cradock murió heroicamente, y fue ddisculpado por el Almirantazgo en el sentido de que su decisión de enfrentarse con la escuadra alemana había estado inspirada en el más elevado concepto del deber y de acuerdo con el espíritu de la Armada inglesa; tal vez en las circustancias en que Craddock encontró al enemigo, la única solución hubiera sido un combate en retirada a partir del momento del avistamiento. Esta acción naval en aguas sudamericanas, conocida como Combate del Coronel, debido a que tuvo lugar cerca de la ciudad chilena del mismo nombre, encontró muy pronto la réplica inglesa en la Batalla de las Malvinas. La importancia de este archipiélago estriba en que desde él se puede bloquear el acceso occidental del estrecho de Magallanes. La escuadra de cruceros del Lejano Oriente del almirante Von Spee había doblado ya el cabo de Hornos, pues había recibido órdenes de dirigirse a Alemania a través del Atlántico, pero antes de llegar a la metrópoli, Von Spee decidió atacar la base de Port Stanley, en las islas Malvinas, para destruir las instalaciones de aprovisionamiento de carbón y la estación radio. Además de los cruceros de batalla, la defensa de las islas estaba constitutida por el viejo acorazado Canopus y por cuatro cruceros acorazados. A las 9:15 del 8 de noviembre de 1914 comenzó la Batalla de las Malvinas entre la flota alemana y la flota inglesa. Después de combatir hasta el úñtimo instante, los buques alemanes se hundieron con toda su tripulación y también el del ejemplar almirante Von Spee, y también sus hijos morirían en este día. El almirante inglés ordenó a dos cruceros acorazados y a uno ligero perseguir a los ligeros alemanes, logrando escapar uno de ellos, que fue hundido meses más tarde por los ingleses al sur de Chile en flagrante violación de las aguas territoriales. La persecuón de los buques alemanes por los ingleses continuó hasta que fueron hundidos la mayoría de éstos. Esta batalla tuvo gran importancia para el desarrollo del crucero de combate, y fue a partir de entonces cuando las grandes potencias navales del mundo iniciaron su construcción. El combate en sí no revistió ninguna enseñanza táctica nueva, siendo esta la única victoria de la Marina en esta guerra. Para terminar, se puede decir que el combate de Coronel fue uno de los mayores éxitos alemanes en el mar y obligó a los aliados a empeñar cinco escuadras en la búsqueda de Von Spee, que había logrado desconcertar al enemigo. Von Spee pensaba en términos estratégicos, y desde el otro extremo del mundo, procuraba ayudar a la flota de alta mar. Se equivocó al atacar las Malvinas. De haber sido Von Spee el almirante de la flota alemana en los primeros tiempos de la guerra, tal vez hubiera tenido una batalla de Jutlandia anticipada, en unas condiciones mucho más favorables para los alemanes, y el curso de la guerra tal vez hubiera sido muy distinto.
Tipo de publicación: Artículos y Capítulos