CIENTÍFICA- 341 estuviesen organizados cual corresponde á su objeto. No se crea por esto que culpo á nadie de este incalificable vacío. No tenemos ningún reglamento que dirija la marcha de este interesante servicio; existe solo el del año 4759, que fué hecho cuando no existia el. Cuerpo de Sanidad militar, porque solo eran asistidos los enfermos por Médicos sin ninguna dependencia del Gobierno central, y cuando la ciencia se hallaba muy atrasada, particularmente en la dietética y en el servicio sanitario de la guerra ; de ahí se sigue una confusión en este ramo y una complicación en su régimen interior, que solo podrán evitar las nuevas disposiciones que se sirva adoptar el Gobierno de S. M. en la nueva ordenanza que estamos esperando con la mayor impaciencia , concluida ya hace mucho tiempo por una comisión régia , compuesta de representantes del Gobierno , de la Administración militar y de nuestro Cuerpo. Este vacío ^ sin embargo , se llena en gran parte por el celo de muchos empleados de dicha Administración, que saben secundar las miras de nuestros Profesores , quienes cumplen su cometido y ocurren á las necesidades del momento, mas bien con arreglo a su conciencia y á sus conocimientos científicos; que en virtud de los preceptos reglamentarios que debieran existir. Tampoco puedo menos de recordar en este momento el grave mal que ocasiona á nuestros hospitales el servicio interior de contratas; nada diré céntralos empresarios, porque yo juzgo que los actuales hacen cuanto deben ; no pudiendo menos de hacer aquí un debido elogio del Sr. D. Manuel Mateu, actual contratista de este hospital militar y del de Barcelona, á quien debemos la notable mejora que esperimentaron estos establecimientos desde la última guerra civil; pero ¿cómo es posible que la mezquina cantidad de cuatro reales y media por estancia alcance a cubrir el coste de la alimentación l curación, ropas, utensilios y empleados en la asistencia de nuestros enfermos? De aquí la inevitable escasez de algunos de estos empleados, y particularmente de practicantes, cuyo número ha sido - designado por personas legas , sin haber sido consultadas las peritas , mas bien en consideración á una mal entendida economía que á la verdadera importancia del servicio de esta clase, cuyo interés es mayor de lo que parece, puesto que se trata de los que están destinados á dar el preciso cum-