— 6 — Analiza la operación, cuyo éxito se cifra en la conquista de admirables posiciones, sobre las que descansa y se fortifica pron- tamente nuestra tropa, radiante de orgullo y animada de un espíritu excelente. A la una de la tarde los fugitivos rífenos habían dejado en poder de las armas españolas la estribación del grupo designado con el nombre de Yebel-Sidi-Ameth-Hach. Nuestras bajas han sido: 1 Oficial muerto (el Teniente López Salcedo) y 2 Oficiales heridos (Capitán Riquelme y Teniente don Luis Molina); 4 soldados muertos y 22 heridos. < Día 10. En la mañana, avanza el General Marina para batir el cam- pamento enemigo instalado en el Zoco de Zelate; es cañoneado vivamente sin que los moros se opongan. En algunos botes transportados á Mar Chica comienza á pres- tar excelentes servicios la compañía de mar de Melilla. Día 11. Fuerzas del Regimiento de Africa, mandadas por el Coronel Axo, practican un reconocimiento armado en los lugares donde se había combatido; encuentran en los barrancos 20 moros acribi- llados á balazos, que son sepultos piadosamente por nuestras tropas. En la orden de la Plaza de este día publícase la copia de este telegrama de S. M., dirigido al General Marina: «Con verdadero entusiasmo felicitóle, y á las fuerzas á sus órdenes, por su valor y conducta en el combate de ayer. »Enorgulléceme la primera acción de guerra librada en mi reinado. Han quedado plenamente confirmadas las grandes espe- ranzas que tengo cifradas en el Ejército y en el porvenir de la Patria. »Lamento las bajas sufridas. »Salude á los heridos y manifieste á la viuda del Teniente Salcedo mi pésame, debiendo servirle de consuelo lo honroso y glorioso de su muerte. »Dios concede el premio siempre á los que saben morir por el cumplimiento de su deber.»